¿Sabes cómo hacer una autoexploración mamaria? ¿Conoces cuál es el mejor momento para llevarla a cabo? Seguramente has escuchado el término infinidad de veces, sobre todo en octubre siendo el mes de la lucha contra el cáncer de mama. No obstante, es un conocimiento que debes incorporar a tus prácticas de bienestar todo el año. Por ello te vamos a explicar todos los detalles del método más práctico y que está completamente en tu manos para contribuir a la prevención y detección oportuna.
¿Cuándo debemos hacerlo?
De acuerdo con HealthLink de British Columbia, el momento para examinar tus senos suele ser una semana después de que comienza tu periodo menstrual, cuando es menos probable que tus senos estén hinchados o sensibles. Hacerlo en diferentes momentos cada mes podría dificultar la comparación de los resultados de un autoexamen con otro. Ahora, si tu ciclo es irregular, o si has dejado de menstruar debido a factores como la menopausia o algún padecimiento médico, lo recomendable es que elijas un día del mes y repitas la autoexploración mamaria siempre en la misma fecha.
¿Cómo realizar una autoexploración mamaria?
Lo primero que debes saber es que es un procedimiento que no causa dolor pero si tu periodo está a punto de comenzar, es posible que sientas una leve molestia al presionar las mamas.
El procedimiento es el siguiente:
1. Quítate toda la ropa por encima de la cintura. Acuéstate y extiende tus senos sobre el pecho, así será más fácil sentir bultos en tus senos o cambios. Revisa todo su pecho, palpando todo el tejido desde la clavícula hasta la parte inferior de la línea del sostén y desde la axila hasta el esternón.
2. Utiliza las yemas de los tres dedos medios de la mano izquierda para revisar tu seno derecho y viceversa. Mueve los dedos lentamente en pequeños círculos del tamaño de una moneda.
3. Usa tres niveles diferentes de presión para sentir todo el tejido mamario. Se necesita una ligera presión para sentir el tejido cerca de la superficie de la piel. Haz presión media para llegar un poco más profundo y aplica una presión firme para sentir el tejido cerca del esternón y las costillas.
4. Además de examinar los senos mientras estás acostada, también puedes hacerlo mientras te bañas. Los dedos enjabonados se deslizan mejor y pueden hacer que sea más fácil sentir los cambios. Levanta el brazo y repite el procedimiento anterior pero de pie.
¿Qué hago si detecto una bolita?
En caso de duda sobre un bulto en el pecho, revisa tu otro seno. Si encuentras el mismo tipo de protuberancia en la misma zona de tu otro pecho, es probable que ambos sean normales.
Tener bultos fibroquísticos también puede dificultar el autoexamen de los senos, porque los bultos se forman en todo el pecho, si es tu caso, pídele a tu médico consejos para resolver este problema.
Si has notado algo extraño en tus senos, lo ideal es que mantengas la calma y consultes a tu ginecólogo, pues no todas las protuberancias son sinónimo de cáncer de mama. Así que jamás te adelantes y primero visita al médico para que te asesore correctamente.
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