¿Valió la pena «La casa de las flores, la película»?
Desde su estreno en 2018, La casa de las flores fue un éxito sin precedentes. Primeramente, dos temporadas de éxito rotundo marcadas por el regreso de Verónica Castro (que sólo estuvo en la primera parte interpretando a Virginia de la Mora, la matriarca de la familia). Asimismo, por el «nacimiento» como icono televisivo de Paulina (Cecilia Suárez), la hija mayor. Su forma de hablar pausada y su desenfado la convirtieron en el personaje más querido de la historia y en estrella de memes y virales. Además del puntapié de todos los conflictos de la serie. Ambos personajes, y una trama divertida pero sólida dirigida por Manolo Caro, convirtieron a la familia De La Mora en una de las familias icónicas de la nueva TV latinoamericana.
Ahora, tras el fin de una tercera temporada que exploró los orígenes y bases de Virginia de la Mora (Verónica Castro), La casa de las flores se presentó en formato largometraje el pasado 23 de junio. Fundamentalmente la expectativa de qué había pasado con los De La Mora y cuáles serían sus nuevos planes activaron una ansiedad similar a la reunión de «Friends» en EEUU, por hacer una comparación. Ahora, ya disponible en la plataforma Netflix, vale preguntarse. ¿Valió la pena el cambio de formato?
¿De qué va «La Casa de Las Flores, la película»?
La trama de la película gira en torno a un secreto que Delia (la ama de llaves interpretada por Norma Angélica) le revela a Paulina mientras espera su turno para una delicada cirugía. En dicho secreto, le revela que en la habitación de sus padres hay un escondite que protege un tesoro familiar. Además, que guarda la prueba que incrimina a Agustín Corcuera (Emilio Cuaik), absuelto del asesinato de Pato (Christian Chávez).
Así, Paulina engaña a sus hermanos para convencerlos de burlar la seguridad de su antigua casa y recuperar ese tesoro. El amor que sienten por Delia y la posibilidad de vengar a su familia llevará a Paulina, Julián (Darío Yazbek) y Elena de la Mora (Aislinn Derbez), la hermana menor, a romper las reglas. Todo con tal de lograr una misión que parece imposible.
Nuestro veredicto
Si bien las tres temporadas tuvieron una recepción positiva, algo que reprocharon los especialistas en su momento fue que las tramas, sobre todo en las dos últimas temporadas, transcurrían en el presente y en el pasado y no pudieron entrelazarse de forma orgánica. Ahora la película ha venido a reivindicar la historia. Fundamentalmente para ponerle punto final a los De la Mora de forma satisfactoria. La cinta sigue la fórmula de una trama paralela en presente y pasado. Solo que ahora ambas se integran y logran enganchar al espectador. Principalmente con la entretenida historia de la búsqueda del tesoro y la infiltración al hogar.
El filme mantiene su espíritu narrativo de humor negro. Asimismo, sus personajes siguen muy bien desarrollados. Sobre todo Paulina (Cecilia Suárez), hoy convertida en símbolo pop contemporáneo, que abraza en la trama su lado más desenfadado.
Más contenido